
El director de las tandas tarde y noche, Luis Eduardo Álvarez, explicó que debido a esta situación existe en el lugar una plaga de mosquitos y ratones, que conjuntamente con el hedor, genera un situación difícil para trabajar.
El brote de aguas residuales pone en riesgo la salud de una población estudiantil que recibe el pan de la enseñanza de lunes a viernes y el domingo cuando se desarrolla el Programa Prepara del Ministerio de Educación.
En la referida escuela hay registrados 1,500 estudiantes del nivel básico, en tres tandas y los domingos algo más de 1,000 alumnos.
Imparten docencia 40 maestros y laboran 7 conserjes durante el día. En la noche no hay personal de apoyo a pesar de que el director ha solicitado su nombramiento.
Álvarez denunció que los niños, profesores y el personal de la escuela viven en medio de un ambiente caracterizado por la proliferación de plagas.
"No podemos suspender la docencia porque se produciría una deserción masiva de estudiantes, pero la salud está por encima de todo, por lo que pedimos el auxilio inmediato de las autoridades", expresó.
Por RAMON HEREDIA